Teorías y formas de análisis de las relaciones entre globalidad y localidad en América Latina (1982-2005)

Los problemas tratados en este volumen, la forma de plantearlos y los caminos para solucionarlos eran desconocidos por los especialistas latinoamericanos en ciencias sociales y humanas en América Latina hasta hace apenas una década. Se ha llamado a la década de 1980 la "década perdida", haciendo referencia a la dificultad de reconversión de las economías nacionales latinoamericanas a regímenes ajustados al modelo neoliberal. Esto vale también, de alguna manera, para el terreno de las ciencias sociales, que pasaron por una etapa de agudo desconcierto, antes de intentar reciclarse adoptando como tema la definición del carácter de "la modernidad" del subcontinente. De modo que al precipitarse el final de la Guerra fría con la caída del muro de Berlín, esas ciencias sociales no tenían a su disposición hipótesis de ninguna clase para explicar propiamente lo que ocurría en el mundo: el gran macro-proceso constituido por la etapa actual de la globalización.
El debate sobre la globalización, que se había iniciado en Europa y el Japón desde los años 1980, así como los debates sobre género, étnia, poscolonialismo y posmodernidad fueron largamente ignorados en América Latina.
Este libro analiza casos concretos: desde la identidad, la producción de coca, Celia Cruz y la "Guantanamera" posnacional hasta el agro-negocio o la modelo Gisele Bündchen como ícono (nacional) global. Doce especialistas llegados de los marcos disciplinarios de la economía, las ciencias sociales, la geografía y abordajes de tipo transdisciplinario en el análisis cultural confrontan aquí diversas formas de aproximación al nexo entre lo global y lo local, formas de trabajo específicas sobre procesos y fenómenos de tipos que apenas se comienza a estudiar de modo sistemático.