Gestión del capital circulante de las empresas industriales

¿Por qué quiebran las empresas industriales en los países en desarrollo? ¿Se debe a los elevados costes de producción o a problemas de liquidez? Son preguntas que rondan la mente de los investigadores. El capital circulante constituye una gran parte de la riqueza de una institución. En las empresas manufactureras, el capital circulante constituye más del noventa por ciento del valor total de los recursos de la empresa. Por lo tanto, el capital circulante es el torrente sanguíneo de cualquier empresa, industrial o no. ¿Pueden los directores financieros ignorar la importancia del capital circulante? Sólo pueden hacerlo por su cuenta y riesgo. Por ello, los directores financieros dedican la mayor parte de su tiempo a gestionar el capital circulante. En la gestión del capital circulante siempre entran en juego la agresividad y la prudencia. Un director financiero puede optar por adoptar cualquiera de los dos enfoques. Si se utiliza un enfoque de inversión agresivo, se utilizará un nivel mínimo de activos líquidos frente a activos productivos. Sin embargo, si se adopta un enfoque de inversión conservador, las empresas utilizarán más activos líquidos que activos productivos. Sea cual sea el enfoque que se adopte, los directivos deben asegurarse de que el nivel de rentabilidad de la empresa sea el más alto posible y de que no haya riesgo de que la empresa quiebre.